miércoles, 26 de enero de 2011

Invierno

Frío

Llevo tanto tiempo con esa sensación en el cuerpo.

Me levanto cada día y ya puede ser la mañana más calurosa de Agosto, que tendré frío. Intento cubrirme con mantas, ponerme una capa tras otra, pero ese frío, quien tan bien ya conozco, no se aleja de mí. La gente se extraña cuando me ven día tras día a un lado del radiador o abrigado con los más extravagantes y grandes abrigos, pero que pretenden que haga si no, morir congelado a ese frío que raspa mi piel, que desgarrada mis entrañas, que me aturde y desorienta, que hacer cuando lo único que conseguía derretirlo murió en un intento de no acabar ardiendo en su calor. Y desde entonces, desde que me deshice de mi propio Sol, de mi aún tan añorado 'X', desde entonces busco ese mismo calor en quien sea... Llevo una vida huyendo de ese frío, intento cobijarme bajo la luz del primer astro que tengo la oportunidad de ver, pero ellos, solo me muestran ese poco de luz y calor que son capaces de darle a alguien como yo. Les pude rogar, suplicar, exigir que no me dejen morir de frío, que ellos indolentes me dirán, que no estuve echo para disfrutar de eso que con tantas ansias deseo.

La gente me dice que controle esas ganas de buscar el fuego que acabe con mi suplicio, que todo acabara llegando solo... y tal vez tengan razón, pero como resistirme a aguardar mientras el hiela mis venas, me arranca los ojos y quiebra mi ya tan dañado corazón, como quieren que me limite a esperar mientras muero en esa ventisca que hay en mi interior.

Hoy ya no hay fe, ya no hay luz, no hay fuego... el farol se volvió a apagar.

Y mientras tanto J. solo me habla de mi amiga. Se que no debería, pero duele tanto como habla de ella, duele tanto ver como la ama, duele tanto oír como suspira al escuchar su nombre, como muere por cada llamada suya, como revive por un simple minuto a su lado, duele pensar que jamás sera mio.

Le intento olvidar con cada fibra de mi ser. Intento hacerme a la idea de que jamás me corresponderá, de que nunca me amara... de que no es ese Sol que tanto ando buscando, él es simplemente un gris muchacho que roto de amor busca consuelo en quien sea, hasta en el mayor de los desconocidos. Y después de este tiempo, sigo sin saber realmente quien es. No se si miente cuando me llama 'hermano', no se si realmente le agrada estar a mi lado, no se si me llama porque se aburre o porque realmente me aprecia. Aprecia... que lejos esta ese aprecio de un 'te quiero'.

Y ahora que hago...

Son estos momentos en los que me doy cuenta que mi vida es una interrogación tras otra. Una pregunta lanzada a un vacío que me es incapaz de responder.

L
na.


''Porque nadie supo robar de tus besos,
eso que hoy te sobra y que nadie añora. ''

3 comentarios:

  1. Querido amigo (permíteme la libertad de llamarte así), te entiendo a la perfección en lo que has escrito. Has contado con todo lujo de detalles una situación que yo también he vivido, y comprendo lo incómodo que es ese frío. Yo también busco atenuarlo en soles pequeños, pero, ¿quién quiere "solecillos" habiendo conocido al rey de los astros?
    No puedo darte ningún consejo, porque sino también me lo aplicaría a mí. Sin embargo, decirte que el tiempo es el mejor médico que hay. Yo lo pude superar (más o menos), acepté que él no me quería como yo quería que me quisiese. Espero que consigas encontrar a quién te de calor.
    Un saludo!

    Pablo

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  2. El frío sólo se quita con chocolate y tequila. O eso leí de algo que dijo mi abuela... y creo que tiene razón.
    Ya verás, en algún momento de tu vida echarás de menos ese vacío.

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  3. El principito también pensaba que su rosa era única en el mundo. Quizá explorar no sea una idea tan estúpida.

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